Como Cristianos, en ocasiones hablamos sobre el poder de las palabras, el poder que tiene una declaración y lo que confesamos por nuestra boca. Esto lo vemos en Romanos 10.9-13. ¿A qué viene todo lo que estoy diciendo?
Antes de continuar, confieso que también he sido culpable de los siguiente. Usualmente cuando nos saludamos como hermanos y nos preguntamos ¿cómo está todo? usualmente la respuesta es 'bien gracias a Dios'. Cuando estamos alabando en el culto, decimos 'la gloria es de Dios', cuando decimos 'Dios es bueno', .ya tienes la idea de lo que estoy diciendo. Quizás te preguntes, ¿entonces que tiene de malo esto que estoy diciendo? Confieso que la respuesta quizás no sea sencilla de explicar o entender para algunos, pero de la manera más simple que lo puedo explicar es diciendo: Nuestro Dios tiene nombre.
Aunque esto no es un estudio bíblico o una disertación que entra a fondo sobre el origen y desarrollo del nombre de nuestro Dios, sin embargo, voy a mencionar algunos puntos importantes.
En esencia lo que estoy diciendo es que referirse a Jehová o a Jesucristo como Dios es hacer una referencia muy general y poco específica, porque tanto el nombre de Jehová como el de Jesucristo son los que dan testimonio de Su poder. Honrémosle también en la manera en que nos referimos.
Por esto y más es que le exhorto que honremos a Jehová nuestro Dios de una manera justa. Esto no se trata de religión, sino de actuar conforme a lo que está escrito en Su Palabra. Bendiciones.
Preguntas guías:
Oración
Padre oro en el nombre de Jesús y te doy gracias por todo tu nombre y todo lo que representa. Ayúdame siempre de recordar quién eres y lo que soy en ti. En el nombre de Jesús. AMEN