Revelarse contra Dios, no obedecer Su palabra es cosa dura. Las palabras que escuchó Pablo (ver Hechos 9.5) de parte de Jesús fueron similares a las palabras que escuchó el Faraón a través de Moisés y Aarón cuando Israel se encontraba cautivo en Egipto (ver Éxodo 9.17) mientras Faraon se rehusaba a dejarlos ir. Ambas órdenes exigían la libertad de un pueblo oprimido o perseguido.
En medio de las señales que Dios manifestaba, la respuesta de Faraón fue muy diferente a la respuesta de Pablo. El primero decidió resistirse a lo que Dios había dicho, pero Pablo reacciona de manera diferente.
Aprendamos a continuación.
Hechos de los Apóstoles 9.5 RVR60
5 Él dijo:
—¿Quién eres, Señor?
Y le dijo:
—Yo soy Jesús, a quien tú persigues; dura cosa te es dar coces contra el aguijón.
Analicemos las palabras de Jesús. Jesus se presenta con Su nombre y le deja saber a Pablo que Él es a quien Pablo perseguía. De todas las apariciones sobrenaturales de Dios en la biblia, en esta ocasión se menciona un nombre y podemos decir de manera personal. A estas palabras le siguen, dura cosa te es dar coces contra el aguijón. Jesus le advierte a Pablo que su determinación atacar a los Cristianos le iba ir mal, porque acababa de encontrarse con el Dios de la gente que el perseguía.
Aunque la biblia no dice directamente que Pablo tenía el corazón endurecido, la definición de esta frase significa el estar determinado hacer algo, en este caso era ir en contra de la presencia de Dios. Esto lo afirmamos en el libro de Éxodo.
Éxodo 9.34
Y viendo Faraón que la lluvia había cesado, y el granizo y los truenos, se obstinó en pecar, y endurecieron su corazón él y sus siervos
La determinación a no escuchar el evangelio de Cristo, a vivir una vida de pecado, de satisfacer los deseos de la carne, etc. representan el cuadro de un corazón endurecido para estos tiempos.
Tanto las señales por las cuales atravesó el faraón para que dejara ir a Israel como el encuentro que tuvo Pablo fueron de gran impacto en sus vidas, con la diferencia de que Pablo no endureció su corazón luego de vivir Su experiencia, al contrario de faraón que decidió endurecer su corazón. Sabemos que la biblia menciona que el endurecimiento del corazón del faraón ocurre porque Dios quería dar señales para glorificarse. Sin embargo hoy en día es una opción abierta que Dios ha permitido para probar nuestra fe.
Si todos tuviéramos la reacción que tuvo Pablo al momento de encontrarse con Jesus, viviríamos en un mundo ideal. ¿Qué quieres que haga Señor? Es por esto que en la palabra de Dios aprendemos que solo debemos tener fe como un grano de mostaza (ver Lucas 17.6), porque solo hay que creer que Dios es real y verdadero para preguntarnos cual es Su voluntad.
Si Pablo hubiera negado a Jesús hubiera corrido la misma suerte que el Faraón, pero no fue así. Sino que fue una de las personas más prominentes de la iglesia primitiva. El Faraón utilizó el pueblo de Israel como esclavo para construir para sí mismo, pero todo terminó destruido en menos de un mes. Pablo, que era hacedor de tiendas o carpas (ver Hechos 18.3) terminó siendo defensor del evangelio de Dios y del hombre más influyente en la iglesia primitiva.
No endurezcas tu corazón. Aprendemos que para influenciar el mundo primero nuestro corazón debe humillarse delante de Dios y luego preguntarle, ¿qué quieres que haga?
Para reflexionar:
- 1¿Quieres que Dios te use como uso a faraón o a Pablo?
- ¿Si existe pecado en tu vida, ¿cual es la motivación?
- ¿Sientes que eres débil en la fe?
Oración: Dios te pido que te reveles a mi vida y me hables, dame un propósito por el cual caminar y servir en tu reino, ayúdame a ser obediente a tu palabra y quitar toda dureza del corazón de mi vida. AMEN
